1.4 Debates historiográficos iniciales: progreso, eurocentrismo y pluralidad
El debate sobre el progreso científico
Desde mediados del siglo XIX, la idea de un progreso continuo y lineal en la ciencia fue propuesta por la corriente positivista liderada por Auguste Comte (1798-1857). Comte estableció una ley de los tres estados y defendió que la humanidad avanzaba desde un estadio teológico, pasando por el metafísico, hasta llegar al positivo o científico. Esta visión influyó en muchos historiadores tempranos de la ciencia.
Durante finales del siglo XIX y comienzos del XX, George Sarton (1884-1956) impulsó esta noción en su obra Introduction to the History of Science (1927-1948), donde describía la ciencia como una sucesión de “grandes épocas” de descubrimiento. Para Sarton, la ciencia europea era la cumbre de un proceso lineal de mejora que comenzaba con los griegos, continuaba con el Renacimiento y desembocaba en la Revolución Industrial.
Sin embargo, hacia la segunda mitad del siglo XX aparecieron críticas a esta perspectiva teleológica:
- Enfoques internalistas pusieron el foco en las lógicas internas de cada disciplina, sin asumir un único camino de desarrollo.
- Enfoques externalistas reivindicaron el papel de factores sociales, económicos y culturales en el devenir científico.
En 1962 Thomas Kuhn (1922-1996) publicó The Structure of Scientific Revolutions, donde cuestionó el progreso continuo y planteó el concepto de “cambio de paradigma”. Kuhn demostró con ejemplos como la transición de la mecánica aristotélica a la newtoniana (siglo XVII) que la ciencia se mueve en saltos cualitativos, no en una escalera uniforme.
El eurocentrismo en la historia de la ciencia
Hasta mediados del siglo XX, la historia de la ciencia era contada casi exclusivamente desde una óptica europea. Se consideraba que el florecimiento de la ciencia genuina había tenido lugar en la Europa moderna y que los aportes de otras civilizaciones eran meramente “precientíficos” o “preparativos”.
Joseph Needham (1900-1995) rompió este monopolio con su magna obra Science and Civilisation in China (1954-2004), en la que demostró hallazgos chinos en hidráulica, metalurgia y física anteriores a la Europa del siglo XVII. El “Problema de Needham” cuestionó por qué China, con un desarrollo tecnológico avanzado, no evolucionó hacia la ciencia experimental moderna.
Ejemplos de la reinterpretación pluricultural:
- Siglo VIII-IX: Al-Khwarizmi, en Bagdad, sistematizó el álgebra (del árabe “al-jabr”), que luego influyó en la Europa medieval.
- Siglo X: Astrónomos del observatorio de Toledo tradujeron textos griegos y árabes, formando un puente de saber hacia Occidente.
- Siglo XIII: Las escuelas coránicas en Al-Andalus fomentaron experimentación con óptica (Ibn al-Haytham, c. 965-1040).
En la Conferencia de París de la UNESCO (1956) se subrayó la necesidad de una historia de la ciencia que incluyera todas las culturas, no solo la europea. A partir de entonces surgieron revistas y series de publicaciones dedicadas a la historia global de la ciencia.
La pluralidad de enfoques historiográficos
Con la superación del modelo único de progreso y la crítica al eurocentrismo, la historia de la ciencia dio paso a una diversidad de métodos. Destacan varios ejes:
- Internalismo vs Externalismo:
- Internalismo: centra la explicación en conceptos, teorías y lógicas propias de la ciencia. Ejemplo: análisis de la teoría de los números por Carl Boyer (1968).
- Externalismo: considera variables sociales, políticas y económicas. Ejemplo: Robert Merton (1910-2003) analizó la ética protestante y su influencia en el desarrollo científico en Science, Technology and Society in Seventeenth-Century England (1938).
- Historia social de la ciencia:
Surge en los años cincuenta y sesenta, con autores como Thomas Kuhn y Ludwik Fleck (1896-1961). Fleck, en Entstehung und Entwicklung einer wissenschaftlichen Tatsache (1935), adelantó el concepto de “denkt style” o estilo de pensamiento.
- Microhistoria y estudios de caso:
En la década de 1980, Steven Shapin y Simon Schaffer publicaron Leviathan and the Air-Pump (1985), comparando los experimentos de Robert Boyle (1660) con los debates políticos y religiosos en la Inglaterra de Cromwell. Este enfoque mostró cómo un experimento científico es también un acto social y retórico.
- Estudios de género y colonialidad:
Investigaciones de finales del siglo XX han analizado cómo las mujeres y los pueblos colonizados quedaron excluidos de la narrativa dominante. Ejemplo: Londa Schiebinger, con su trabajo The Mind Has No Sex? (1989), exploró la invisibilización de las científicas en la Edad Moderna.
- Perspectivas STS (Science and Technology Studies):
A partir de los años setenta se consolidó un enfoque interdisciplinar que estudia ciencia y tecnología como prácticas culturales. Bruno Latour (1947-2022) y Michel Callon (1958-) introdujeron la Teoría del Actor-Red (ANT) en los años ochenta, describiendo la ciencia como un proceso de negociación entre humanos y no-humanos.
Ejemplos y datos cronológicos
| Historiador | Obra | Año | Contribución |
| Auguste Comte | Curso de filosofía positiva | 1830-1842 | Teoría del progreso lineal de la ciencia |
| George Sarton | Introduction to the History of Science | 1927-1948 | Historia de la ciencia como progreso europeo |
| Joseph Needham | Science and Civilisation in China | 1954-2004 | Demostración de aportes no europeos |
| Thomas Kuhn | The Structure of Scientific Revolutions | 1962 | Cambios de paradigma en lugar de progreso lineal |
| Steven Shapin Simon Schaffer | Leviathan and the Air-Pump | 1985 | Microhistoria de la práctica experimental |
| Londa Schiebinger | The Mind Has No Sex? | 1989 | Historia de género en la ciencia |
| Bruno Latour Michel Callon | Actor-Network Theory | Década de 1980 | Ciencia como red de actores humanos y no-humanos |
Reflexiones finales
Los debates historiográficos iniciales posibilitaron una transformación profunda en la disciplina. La crítica al progresismo unilineal, la superación del eurocentrismo y la incorporación de nuevas perspectivas metodológicas han enriquecido el entendimiento de la ciencia como fenómeno cultural y social.
Hoy conviven enfoques que reivindican simultáneamente la especificidad interna de los desarrollos científicos, la influencia de contextos sociales y políticos, y la diversidad global de tradiciones de conocimiento. Esta pluralidad permite reconstruir una historia de la ciencia más compleja, inclusiva y fiel a la realidad múltiple de las comunidades científicas a lo largo de la historia.
Profundizando sobre el punto 1.4 Debates historiográficos iniciales: progreso, eurocentrismo y pluralidad
Libros recomendados para ampliar conocimiento sobre este tema:
Bibliografía Recomendada sobre Debates Historiográficos Iniciales
1. Progreso
- Herbert Butterfield. The Origins of Modern Science. Londres, 1949.
- Steven Shapin. The Scientific Revolution 1500–1800. Chicago, 1968.
2. Eurocentrismo
- Kapil Raj. Relocating Modern Science: Circulation and the Construction of Knowledge in South Asia and Europe, 1650–1900. Palgrave, 2007. (Disponible en https://doi.org/10.1057/9780230598130)
- Pratiksha Baxi. Decolonizing Knowledge and the Question of Criteria. 2017. (Disponible en https://example.com)
3. Pluralidad de Historia Universal de la Ciencia
- John M. Staudenmaier. A Pluralist History of Science. Chicago, 2011.
- Helge Jordheim (ed.). The Palgrave Handbook of the History of Modern Science. Palgrave, 2016.
- Amílcar Herrera. Historia de la ciencia: Las múltiples historias. Madrid, 2019.

Deja una respuesta